Capitulo 7
Con el tiempo
Tú que has visto muchas primaveras y veranos e inviernos y otoños, dime cual es la enseñanza que te ha dado la vida , dijo la mariposa posándose sobre la rosa y única flor de su jardín, pues no era nadie más que ella misma . Porque la rosa representa la existencia fragilidad y transitoriedad del hombre sobre esta tierra , y la mariposa la metamorfosis o cambios que este debe hacer o procurar por sí mismo para su propio bienestar .
Con el tiempo entendí que en una relación en donde son más las lágrimas que las sonrisas y las tristezas que la alegría y los problemas que las soluciones , ahí no está nuestro lugar , que necesitamos volar hacia otro lugar o dirección, para que no se aumente el dolor que hiere y rompe al corazón .
Entendí que las heridas provocadas por las diferentes circunstancias, son solamente la vía que utiliza la vida para hacernos más fuertes e independientes , para hacer crecer y madurar al niño que llevamos dentro , el cual con el transcurso del tiempo se va alejando para no volver jamás , y el cual tampoco debemos extrañar porque cada día trae consigo nuevas y mejores enseñanzas .
También entendí que solo puede dañarme aquello a lo que yo le sume importancia , porque el guardián de mi vida soy yo misma , en mi mano tengo la llave y solo yo decido que dejo o no entrar a mi corazón , y que mi valor no me lo dan los demás sino yo . Cuando aprendo a amarme y respetarme y a asumir mis responsabilidades ante la vida , la cual debo aprender a vivir por mí misma.
Con el tiempo aprendí que no se vive cuando se quiere o se busca solamente agradar a los demás, y nos olvidamos de nuestros valores y necesidades y derechos .
Entendí que no hay diferencia entre un día un año y otro ,porque esto solo forma parte del tiempo, lo que hace la diferencia es lo que el hombre pueda hacer nuevo y bueno para mejorar su calidad de vida .
El sol permanece en su sitio y de igual manera la luna y las estrellas , ellos solo anuncian el inicio y el fin de los siglos .
El rio sigue su curso y el viento soplando y corriendo a veces lento y también ligero, el mar calmo y embravecido y el canto de las aves que parece que agradecen y alaban a Dios , algo que no hacen todos los hombres .
Entendí que la vida es como un rompecabezas, en donde es necesaria la paciencia para colocar y completar todas sus piezas .Que no podemos retroceder el tiempo para corregir lo que hicimos mal , pero si tenemos el presente para reflexionar y darnos la oportunidad de comenzar de nuevo , con la experiencia o la enseñanza que nos dio nuestros errores y fracasos.
El pasado no se olvida simplemente sanamos las heridas , pero esto solamente ocurre cuando decidimos cerrar esos viejos ciclos negativos e iniciar una nueva historia, sobre el fundamento de la fe y la esperanza y la confianza que hayamos desarrollado en nosotros mismos para darle prioridad y valor a todo lo mejor y bueno que se presente en nuestro futuro . De lo contrario el pasado nos atormentara y pesara siempre en la conciencia , nos quitara la paz y la felicidad .
Se dice que el tiempo lo cura todo , pero este solamente sanara aquello que nosotros decidimos soltar .
Con el tiempo entendí que cuando el sol llega a su ocaso es como si se debilitasen sus rayos , pero en realidad es porque está próximo a ocultarse , pero no es que se va pues el siempre esta , simplemente le llega el momento de reinar a la señora de la oscuridad , la cual en las noches veraniegas y principalmente en la luna llena cuando se muestra en toda su fuerza pareciera que sale a pasear con todas sus princesas , sus hijas las estrellas .A diferencia del hombre que se va para no volver jamás a esta tierra.
Cuando el hombre fallece no hay alma o espíritu en el que se agite, que se angustie, que ame , odie o anhele , no hay mente que piense pues duerme profundamente , hasta que Dios con su voz lo despierte sea para vida o para muerte , y sea conducido al lugar que haya elegido mientras decidió por sí mismo , conforme a su libre albedrio .
El hombre se condena o se salva por sí mismo , no se le puede atribuir a nadie la salvación ni la condenación de su alma .
Autora
Ester Boza
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